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5 de Mayo
¡Nuestro cuerpo es todo un mundo! Y sus funciones, cambios y necesidades, también lo son; por eso debemos conocer tanto sus partes y sistemas, como las posibles enfermedades y complicaciones que podemos experimentar. Si estás aquí es porque quizá el tema del cáncer de cuello uterino te ha removido fibras de alguna manera, ya sea porque alguien cercano a ti lo ha padecido, porque tú lo estás experimentando o por simple curiosidad; sea como sea, ¡es un tema del que todas deberíamos estar hablando!
Este tipo de cáncer aparece en la parte inferior del útero (el cuello uterino) y se debe, en la mayoría de los casos, a una infección persistente con ciertos tipos del virus del papiloma humano (VPH)... ¡No te alteres! Es un tema al que prestar atención, pero la buena noticia es que es prevenible y tratable si se detecta a tiempo.
El cáncer de cuello uterino pocas veces aparece de la nada, existen ciertos factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollarlo. La infección por VPH es la principal causa, pero también influyen el tabaquismo, un sistema inmunológico debilitado, el uso prolongado de anticonceptivos orales y antecedentes familiares.
¡Préstale atención a los giros inesperados!, este cáncer puede ser silencioso en sus primeras etapas; sin embargo, algunos signos pueden darte pistas:
Nosotras te aconsejamos que estés siempre atenta a estas señales y, ante cualquier duda, consulta con tu ginecólogo.
El cuerpo siempre nos da mensajes, ¡sólo hay que saber escucharlo! Estos son algunos de los signos que pueden indicar que algo no anda bien:
Si hay sangrados entre periodos, después de las relaciones sexuales o tras la menopausia, es momento de hablar con un especialista. ¡No es normal y tu cuerpo te está pidiendo atención!
Si notas que tu flujo ha cambiado en color, textura o tiene un olor fuerte, puede ser señal de una infección o algo más serio; mejor chequearlo con el médico.
Las relaciones sexuales no deberían doler ni generarte molestias inusuales; si notas cierta incomodidad o sangrado, ¡no lo dejes pasar! Podría ser una señal de alerta.
Si sientes una presión o dolor en la parte baja del abdomen que no desaparece y que va aumentando en intensidad poco a poco, incluso cuando no estás menstruando, ¡es mejor revisar qué está pasando!
¿Tipos? ¡Así es! Existen dos tipos principales de cáncer de cuello uterino y debes conocerlos para aprender a identificarlos y tratarlos correctamente:
Carcinoma de células escamosas: el más común, se origina en las células planas que recubren el cuello uterino.
Adenocarcinoma: menos frecuente, pero igual de importante, nace en las células glandulares del cérvix.
¡El único factor de riesgo no es el VPH! Hay otros factores que pueden aumentar el riesgo, como:
Comenzar la vida sexual a una edad muy temprana
Tener múltiples parejas sexuales
Un sistema inmunológico debilitado
Fumar (el tabaco también afecta el cuello uterino, no solo los pulmones)
¡Sí! La prevención es clave; realmente, será determinante en el proceso de tratamiento y recuperación, por eso Nosotras te dejamos algunas acciones que puedes tomar:
¡Vacúnate contra el VPH!
Realízate citologías regulares (Papanicolaou)
Usa métodos de protección como el condón durante las relaciones sexuales
Mantén un estilo de vida saludable
¿El diagnóstico es positivo? ¡Llévalo con calma! Hay opciones de tratamiento según la etapa del cáncer:
Cirugía: si se detecta temprano, puede extirparse el tejido afectado
Radioterapia y quimioterapia: en casos más avanzados, ayudan a reducir o eliminar el cáncer
Terapia dirigida e inmunoterapia: tratamientos más modernos que potencian la respuesta del sistema inmunológico
El cáncer de cuello uterino es prevenible y, si se detecta a tiempo, ¡tratable! Lo más importante es escuchar a tu cuerpo y realizar chequeos médicos periódicos. Sabemos que la información es poder, y ahora tienes en tus manos la clave para cuidar de tu salud. ¡No dejes que el miedo te aleje del autocuidado!
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