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23 de Noviembre
Hoy queremos hablarte de un tema que a Nosotras nos encanta, porque tiene que ver mucho con la salud y el amor propio, además, estamos seguras que ya lo has escuchado hablar varias veces. Hoy en día escuchamos de todo tipo de dietas, alimentación saludable, tips para tener el cuerpo perfecto… Pero ¿te has puesto a pensar si tienes una alimentación sostenible en el tiempo y que sea saludable para ti?
Por eso hoy queremos hablarte sobre la alimentación consciente, te explicaremos qué es y cómo puedes aplicarla con unos tips y recomendaciones súper fáciles.
Empecemos por lo primero, porque a estas alturas estarás pensando ¿Qué es la alimentación consciente? ¿Qué tiene de diferente a todas las otras dietas que ya has escuchado? Pues muy sencillo, este nuevo término, también conocido como mindful eating, hace referencia a tener atención plena en lo que comemos, en los pensamientos que tenemos durante la experiencia, que sentimos y qué emociones sientes mientras comes.
Seguramente, sentarte a disfrutar de una comida se vuelve algo rutinario, pero todo lo que vivimos durante el proceso es importante y tiene relación directa con la salud. ¿Por qué? sigue leyendo y te contamos todo sobre el mundo de la alimentación consciente.
Tal vez has notado, o no, que no siempre comemos porque tengamos hambre, a veces lo hacemos porque estamos tristes, ansiosos o a veces incluso porque no tenemos nada que hacer, ¡sí, así como lo lees! estamos seguras que si te pones a pensar, más de una vez has ido a la nevera a mirar que hay para comer sin ni siquiera sentir hambre.
Por esta y muchas más razones poner en práctica la alimentación consciente te ayudará a tener una mejor relación con la comida, además aprender a escuchar tu cuerpo y tus emociones te traerá beneficios no solo físicos, sino que aprenderás a entender cuando no estás bien y como canalizar esas energías que no sea a través de la comida, evitando así que pongas en riesgo tu salud por una mala alimentación.
¡Deja de hacer dietas, de sentir culpa por lo que comiste un día o un fin de semana! ¿Sabías que lo importante es cómo comemos el 80% del tiempo? Si regularmente tienes una alimentación rica en alimentos que te aportan VIDA no tienes que preocuparte por esos antojos que te dan a veces, es más disfrútalos sin remordimientos.
Para tener una estilo de vida balanceado debes saber que hay varios tipos de formas en la que comemos, aquí te los explicamos para que los identifiques:
El emocional: este estilo aparece cuando canalizamos nuestras emociones con la comida, es decir, cuando estamos tristes, ansiosos, estresados… En esta ocasión comemos no por necesidad o hambre sino porque nuestro cuerpo está tratando de liberar algún sentimiento.
El restrictivo: este tipo de alimentación es más conocido como las dietas, en las que se restringen alimentos, cantidades etc. Este estilo de alimentación no es sostenible en el tiempo y en algunas ocasiones puede generar efecto rebote, que quiere decir, que una vez empiezas a comer como antes, vuelves a subir esos kilitos[1] de más que querías bajar.
El externo: en este tipo de ingesta, lo que sucede es que se generan antojos detonados por el olor, o ves alguna comida que te generó un antojo, pero tampoco, como en el emocional, se da porque necesariamente tengas hambre.
Ahora que sabes que existen estos tipos de ingesta, ¿crees que siempre comes porque tienes hambre?
Entendemos que muchas veces, nos vemos haciendo dietas imposibles de sostener, porque viene un viaje, unas vacaciones, un día de sol en que queremos lucir un cuerpo perfecto y bajar esos, supuestos kilitos de más que tenemos.
Pero ¿sabes algo? TODAS TENEMOS ESE CUERPO PERFECTO PARA EL VERANO, sí, con estrías, con algunos gorditos[3] o cicatrices, todas somos hermosas, aprendamos a amar cada parte de nuestro cuerpo, enfócate en lo que más te gusta de tí y luce ese vestido de baño que tanto te gusta, seguro te vas a ver ESPECTACULAR. Y lo más importante, deja de compararte, porque por un lado no te vas a sentir bien y siempre vas a encontrar algo que criticar, y por otro lado porque todas, hasta las modelos de las revistas tienen inseguridades y cosas que quiere mejorar, y no está mal, siempre y cuando te ames y estés saludable.
Cuando aprendemos a llevar una alimentación consciente, cuando comemos porque nuestro cuerpo lo pide y le proporcionamos alimentos altos en proteínas y nutrientes lo verás reflejado en tu salud, ¿por qué? porque vas a tener una piel más radiante, lo notarás en el cabello, las uñas, y hasta en la energía que sientes cada día.
Tener una alimentación balanceada te ayudará a prevenir enfermedades como la obesidad, ya que no comerás por ansiedad o detonantes externos sino porque tu cuerpo te está pidiendo alimentos reales. Otros beneficios que te puede traer la alimentación consciente son:
Ayuda a mejorar la digestión
Te ayuda a bajar de peso o mantener un peso saludable según tus necesidades
Reduce la ansiedad
Promueve la concentración y sentirás más energía
Aprenderás a diferenciar entre el hambre psicológica y fisiológica
Evitarás comer por antojos
Deja ya de pensar que tienes que tener un cuerpo de 90,60,90. Hoy más que nunca los estereotipos están pasados de moda y no hay un tipo de cuerpo perfecto al que debas llegar, sino uno con el que te sientas cómoda, feliz y sobre todo saludable.
Por eso queremos darte algunos mini tips que te ayudarán a poner en práctica una alimentación con sentido y sostenible en el tiempo, verás cómo tu relación con la comida da un giro de 180 grados y te sentirás más feliz y libre de culpas.
Aprende y conoce tu comida: pregúntate si incluyes todo tipo de alimentos, frutas, verduras, proteínas (animal o vegetal), carbohidratos, etc. Todos los grupos de alimentos aportan algo de valor a tu cuerpo, ¡no los restrinjas!
Sé consciente, ¿tienes hambre psicológica o fisiológica? Intenta identificar si es un antojo. Te damos un tip aquí entre Nosotras, toma agua cuando sientas hambre, a veces estamos deshidratadas, no necesariamente estás sintiendo hambre. Si igual aún quieres comer algo, intenta que sea algo que te aporte nutrientes.
Separa el tiempo para comer y ten plena conciencia sobre el proceso: muchas veces nos sentamos a comer haciendo mil cosas a la vez, ¿que tal si dedicas el tiempo y el espacio para hacerlo? notarás la diferencia.
Empieza por pequeñas porciones, ¿sabías que tu cerebro asimila la llenura unos minutos después de comer? come despacio y permítete escuchar y sentir tu cuerpo para saber si quieres más, esto te ayudará a evitar los excesos.
Si tienes más tips que nos puedan servir a tener una alimentación equilibrada y consciente no dudes en escribirnos, ¡nos encanta leerte! Y recuerda, disfruta y se feliz, la alimentación no tiene que ser un castigo o sufrimiento, además, ya tienes ese cuerpo perfecto para el verano, ámalo.
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