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26 de Noviembre
Entre Nosotras no hay tabús y disfrutamos el conocer cada vez más sobre nuestro cuerpo. Aprendamos juntas más sobre el famoso punto G de la mujer, este es el punto al que todas queremos llegar, pero ¿qué se necesita para llegar a él? Quédate con Nosotras para responderte preguntas como: ¿qué necesitamos para estimularlo?, ¿es solo cuestión de saber en dónde se encuentra?, ¿depende de nuestra pareja o es un punto para ser plenamente independientes y empoderadas? ¡Aquí te lo contamos todo!
El término punto G de la mujer, claramente no fue inventado por un hombre, pero sí referenciado por primera vez por uno de ellos en el año de 1940 por el ginecólogo Ernst Grafenberg, el cual lo asoció no solo a un punto como tal, sino a toda la zona erógena del clítoris, la cual si se estimula de forma adecuada, termina en aquella sensación electrizante llamada orgasmo. ¡Y sí! No en vano de solo pensarlo, podemos fantasear, pues es nuestro órgano máximo de placer con más de 12.0000 terminaciones nerviosas.
El punto G de la mujer, comúnmente asociado con el clítoris, se encuentra en la zona interna de nuestra Zona V y puede ser visible desde la vulva. Para muchos, tanto hombres como mujeres, sigue siendo un misterio, ¡y no es para menos! Este órgano tiene muchas características curiosas y múltiples formas de estimulación.
El clítoris es el único órgano del cuerpo humano cuya única función es proporcionar placer. Aunque solo es visible en un 2%, en la edad adulta puede alcanzar hasta siete veces su tamaño original. Si alguna vez te has preguntado por qué es tan importante el punto G de la mujer, es porque su correcta estimulación puede generar niveles de placer únicos.
Si te lo estabas preguntando sí, ¡los hombres también tienen punto G! Porque no existe nada que nos compete tanto a todos como humanidad que el placer. Todos lo queremos, todos lo soñamos y esperamos que todos lo tengamos. En el caso de los hombres, su punto G se encuentra ubicado en la próstata, la cual es del tamaño de una nuez. Aquellos que se aventuran a explorarlo, lo califican como la mejor estimulación que existe.
Aunque el punto G de la mujer ha sido considerado por muchos como la principal zona de placer, la realidad es más compleja. Según expertos, el placer es subjetivo y varía de mujer a mujer. Si bien está comprobado que el punto G puede ofrecer sensaciones intensas, no todas las mujeres lo experimentan de la misma manera.
Existen otras zonas erógenas, como el clítoris, los labios menores y los primeros centímetros de la vagina, que también juegan un papel fundamental en la experiencia sexual.
Ahora, con esta información previa, estamos más que listas para ponernos, literalmente, ¡manos a la obra!, pues antes de conocer las posiciones sexuales para estimular el punto G de la mujer, debemos reconocer las maneras que tenemos Nosotras mismas para potencializar el placer, pues somos las principales responsables de él.
Una de las formas más comunes de estimular el punto G de la mujer es mediante movimientos de arriba a abajo con los dedos alrededor del clítoris. Hacer presión suave y utilizar uno o varios dedos es una técnica efectiva para iniciar el placer. Esta forma de estimulación es ideal para comenzar a explorar tu Zona V.
Para un mayor estímulo, coloca el clítoris entre tu dedo índice y medio, y aumenta la velocidad de los movimientos de forma gradual. Esta técnica permite intensificar la estimulación del punto G de la mujer, creando una experiencia placentera y controlada.
En la posición de puente de cadera, realiza movimientos laterales con tus dedos mientras mantienes la cadera elevada. Esto te ayudará a sentirte más cómoda y aumentar el placer en tu Zona V, incluyendo la estimulación del punto G de la mujer.
El órgano sexual más importante es el cerebro, ¡y muchas veces lo olvidamos! Antes de concentrarte en la estimulación física, es fundamental explorar y estimular tu mente. El juego previo y la sensibilidad de la piel juegan un papel esencial en la experiencia completa de placer.
En esta posición, estarás en control total, lo que te permitirá ajustar la velocidad y los movimientos según prefieras. La posición de vaquera es perfecta para facilitar el contacto con tu clítoris y estimular el punto G de la mujer de manera efectiva.
En la postura de perrito, aunque el hombre domine la situación, puedes tomar control de tu propio placer. Ajusta la posición según te sientas más cómoda, ya sea en cuadrupedia o utilizando una almohada bajo tu abdomen. Explorar diferentes ángulos puede ayudarte a encontrar nuevas formas de estimular el punto G de la mujer.
Es momento de poner en práctica todo lo que acabamos de aprender. Todas las mujeres tenemos nuestro Punto G, y hay diferentes maneras de estimularlo. Autoconocernos es la clave para darle la bienvenida al placer. Cuando descubras lo que más te funciona, háblalo con tu pareja y escucha activamente sus preferencias para fortalecer la relación y disfrutar de una sexualidad más plena. Recuerda: "La felicidad se expresa en la cama, y las oportunidades de mejorar se conversan fuera de ella."
https://www.eudona.com/blog/punto-g-femenino/
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